Los productos sin preservativos tienen una duración más corta porque no contienen químicos que inhiben el crecimiento de bacterias y hongos. Al ser más naturales, su frescura depende de factores como la temperatura, la humedad y el manejo adecuado. Para disfrutar su mejor calidad, se recomienda almacenarlos correctamente y consumirlos en el tiempo indicado de 30 a 60 días.
¡Así garantizamos un producto más saludable y lleno poderes medicinales!